miércoles, 22 de mayo de 2013

Los manuscritos de Sor Lucía, con los secretos de Fátima, publicados por El Vaticano

Son los manuscritos en portugués de Sor Lucía, con los secretos de Fátima, incluido el tercero.
Su traducción al castellano y la explicación oficial sobre los mismos y toda la doctrina sobre las apariciones en general y sobre Fátima en particular, pueden encontrarsen en la web del Vaticano, pinchando el siguiente enlace, donde pueden verse, descargarse e imprimir:



 
 


(Traducción) 6

Tendré que hablar algo del secreto, y responder al primer punto interrogativo.
¿Qué es el secreto? Me parece que lo puedo decir, pues ya tengo licencia del Cielo. Los representantes de Dios en la tierra me han autorizado a ello varias veces y en varias cartas; juzgo que V. Excia. Rvma. conserva una de ellas, del R. P. José Bernardo Gonçalves, aquella en que me manda escribir al Santo Padre. Uno de los puntos que me indica es la revelación del secreto. Sí, ya dije algo; pero, para no alargar más ese escrito que debía ser breve, me limité a lo indispensable, dejando a Dios la oportunidad de un momento más favorable.
Pues bien; ya expuse en el segundo escrito, la duda que, desde el 13 de junio al 13 de julio, me atormentó; y cómo en esta aparición todo se desvaneció.
Ahora bien, el secreto consta de tres partes distintas, de las cuales voy a revelar dos.
La primera fue, pues, la visión del infierno.
Nuestra Señora nos mostró un gran mar de fuego que parecía estar debajo de la tierra. Sumergidos en ese fuego, los demonios y las almas, como si fuesen brasas transparentes y negras o bronceadas, con forma humana que fluctuaban en el incendio, llevadas por las llamas que de ellas mismas salían, juntamente con nubes de humo que caían hacia todos los lados, parecidas al caer de las pavesas en los grandes incendios, sin equilibrio ni peso, entre gritos de dolor y gemidos de desesperación que horrorizaba y hacía estremecer de pavor. Los demonios se distinguían por sus formas horribles y asquerosas de animales espantosos y desconocidos, pero transparentes y negros.
Esta visión fue durante un momento, y ¡gracias a nuestra Buena Madre del Cielo, que antes nos había prevenido con la promesa de llevarnos al Cielo! (en la primera aparición). De no haber sido así, creo que hubiésemos muerto de susto y pavor.
Inmediatamente levantamos los ojos hacia Nuestra Señora que nos dijo con bondad y tristeza:
— Visteis el infierno a donde van las almas de los pobres pecadores; para salvarlas, Dios quiere establecer en el mundo la devoción a mi Inmaculado Corazón. Si se hace lo que os voy a decir, se salvarán muchas almas y tendrán paz. La guerra pronto terminará. Pero si no dejaren de ofender a Dios, en el pontificado de Pío XI comenzará otra peor. Cuando veáis una noche iluminada por una luz desconocida, sabed que es la gran señal que Dios os da de que va a castigar al mundo por sus crímenes, por medio de la guerra, del hambre y de las persecuciones a la Iglesia y al Santo Padre. Para impedirla, vendré a pedir la consagración de Rusia a mi Inmaculado Corazón y la Comunión reparadora de los Primeros Sábados. Si se atienden mis deseos, Rusia se convertirá y habrá paz; si no, esparcirá sus errores por el mundo, promoviendo guerras y persecuciones a la Iglesia. Los buenos serán martirizados y el Santo Padre tendrá mucho que sufrir; varias naciones serán aniquiladas. Por fin mi Inmaculado Corazón triunfará. El Santo Padre me consagrará a Rusia, que se convertirá, y será concedido al mundo algún tiempo de paz.7





(Traducción)8
« J.M.J.
Tercera parte del secreto revelado el 13 de julio de 1917 en la Cueva de Iria-Fátima.
Escribo en obediencia a Vos, Dios mío, que lo ordenáis por medio de Su Excelencia Reverendísima el Señor Obispo de Leiria y de la Santísima Madre vuestra y mía.
Después de las dos partes que ya he expuesto, hemos visto al lado izquierdo de Nuestra Señora un poco más en lo alto a un Ángel con una espada de fuego en la mano izquierda; centelleando emitía llamas que parecía iban a incendiar el mundo; pero se apagaban al contacto con el esplendor que Nuestra Señora irradiaba con su mano derecha dirigida hacia él; el Ángel señalando la tierra con su mano derecha, dijo con fuerte voz: ¡Penitencia, Penitencia, Penitencia! Y vimos en una inmensa luz qué es Dios: « algo semejante a como se ven las personas en un espejo cuando pasan ante él » a un Obispo vestido de Blanco « hemos tenido el presentimiento de que fuera el Santo Padre ». También a otros Obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas subir una montaña empinada, en cuya cumbre había una gran Cruz de maderos toscos como si fueran de alcornoque con la corteza; el Santo Padre, antes de llegar a ella, atravesó una gran ciudad medio en ruinas y medio tembloroso con paso vacilante, apesadumbrado de dolor y pena, rezando por las almas de los cadáveres que encontraba por el camino; llegado a la cima del monte, postrado de rodillas a los pies de la gran Cruz fue muerto por un grupo de soldados que le dispararon varios tiros de arma de fuego y flechas; y del mismo modo murieron unos tras otros los Obispos sacerdotes, religiosos y religiosas y diversas personas seglares, hombres y mujeres de diversas clases y posiciones. Bajo los dos brazos de la Cruz había dos Ángeles cada uno de ellos con una jarra de cristal en la mano, en las cuales recogían la sangre de los Mártires y regaban con ella las almas que se acercaban a Dios.
Tuy-3-1-1944 ».

Una indicación para la interpretación de la tercera parte del « secreto » la había ya insinuado Sor Lucía en una carta al Santo Padre del 12 de mayo de 1982. En ella se dice:
« La tercera parte del secreto se refiere a las palabras de Nuestra Señora: “Si no [Rusia] diseminará sus errores por el mundo, promoviendo guerras y persecuciones a la Iglesia. Los buenos serán martirizados, el Santo Padre sufrirá mucho, varias naciones serán destruidas” (13-VII-1917).
La tercera parte es una revelación simbólica, que se refiere a esta parte del Mensaje, condicionado al hecho de que aceptemos o no lo que el mismo Mensaje pide: “si aceptaren mis peticiones, la Rusia se convertirá y tendrán paz; si no, diseminará sus errores por el mundo, etc.”.
Desde el momento en que no hemos tenido en cuenta este llamamiento del Mensaje, constatamos que se ha cumplido, Rusia ha invadido el mundo con sus errores. Y, aunque no constatamos aún la consumación completa del final de esta profecía, vemos que nos encaminamos poco a poco hacia ella a grandes pasos. Si no renunciamos al camino del pecado, del odio, de la venganza, de la injusticia violando los derechos de la persona humana, de inmoralidad y de violencia, etc.
Y no digamos que de este modo es Dios que nos castiga; al contrario, son los hombres que por sí mismos se preparan el castigo. Dios nos advierte con premura y nos llama al buen camino, respetando la libertad que nos ha dado; por eso los hombres son responsables ».5
« En Portugal se conservará siempre el dogma de la fe, etc... ».


Recordemos muy resumidamente:

1.- Desde la Consagración del 25 de Marzo de 1984, hecha por todos los Obispos del Papa en Comunión con el Papa y por él mismo en Roma, ante una imagen de la Virgen de Fátima, se sucedieron una serie de acontecimientos que no tienen otra explicación a los ojos de la Fe, que el cumplimiento exacto y puntual de cuanto fue anunciado. Entre otras fechas y otros acontecimientos, extraigo los siguientes:
2.- El 13 de mayo de 1984 estalló el gran arsenal nuclear soviético en Murmansk, desde donde preparaban la invasión de toda Europa.
3.- El 9 de noviembre de 1989 cayó el Muro de Berlín (Festividad de la Almudena, imagen encontrada en un muro que se derrumbó).
4.- El 22 de agosto de 1991 fue arriada la bandera soviética e izada la antigua bandera rusa y se prohibió el Partido Comunista. En el calendario litúrgico actual es "María Reina". En el antiguo, el "Inmaculado Corazón de María". Como Ella dijo: "al final, Mi Corazón Inmaculado triunfará".

martes, 14 de mayo de 2013

Aumenta el catolicismo. Anuario Pontificio 2012

En África y Asia el crecimiento es superior al de la población

Anuario Pontificio 2013: aumentan los católicos en el mundo

El cardenal Secretario de Estado, Tarcisio Bertone y el arzobispo Angelo Becciu, Sustituto para los Asuntos Generales, presentaron esta mañana al Santo Padre la edición del Anuario Pontificio del 2013, en presencia de los colaboradores en la elaboración e impresión del volumen. También fue presentado el Annuarium Statiscum Ecclesiae, a cargo del mismo dicasterio.
(VIS/InfoCatólica) De la lectura de los datos se pueden recoger algunas novedades relativas a la vida de la Iglesia católica en el mundo en 2012 y hasta la elección del Papa Francisco.
En ese período cabe destacar que se han erigido 11 nuevas sedes episcopales, 2 ordinariatos personales, 1 vicariato apostólico y 1 prefectura apostólica. Asimismo se elevaron 1 prelatura territorial a diócesis y 2 exarcados apostólicos a eparquías.
Las estadísticas, que se refieren al año 2011, muestran las dinámicas de la Iglesia Católica en las 2.979 circunscripciones eclesiales del planeta. Por lo que respecta al número de católicos en el mundo, en 2011 era de 1.214.000 frente a los 1.196 millones de 2010 con un aumento de 18 millones de fieles, es decir, un 1,5%. En el transcurso de los dos últimos años la presencia de católicos bautizados en el mundo permanece estable, alrededor del 17,5%.
Los católicos han aumentado en África (4,3%) que ha acusado, entre 2010 y 2011, un aumento de su población de 2,3%. . En el continente asiático también se ha registrado un aumento de católicos superior al de la población (2,0% frente al 1,2%). En América y Europa el aumento de los católicos y de la población es igual (0,3%). En 2011 el total de católicos bautizados estaba distribuido, por continente, de este modo: África (16,0%); América (48,8%); Asia (10,9%); Europa (23,5%) y Oceanía (0,8%).
De 2010 a 2011 los obispos pasaron de 5.104 a 5.132, con un aumento relativo del 0,55% El incremento se ha registrado sobre todo en Oceanía (+4,6%) y en África (+1,0%) mientras Asia y Europa están ligeramente por debajo de la media mundial y en América no se registran variaciones.
Prosigue la tendencia al crecimiento del número de sacerdotes comenzada en el año 2000. A 31 de diciembre de 2011 se contaban 413.418 presbíteros, frente a los 405.067 de la misma fecha en 2001. Sin embargo, ese aumento no es homogéneo. En África y Asia el incremento es respectivamente del +39,5% y del + 32% ( con un aumento de más de 3.000 sólo en 2011). En América la situación es estacionaria (122.000) mientras Europa, en el último decenio, ha asistido a una disminución que supera el 9%.
Prosigue la fuerte expansión de los diáconos permanentes que han pasado de los 29.000 de 2001 a los 41.000 de 2011. Están presentes sobre todo en América del Norte y en Europa que cuentan con el 97,4% del total, mientras el 2,6% restante se reparte entre África, Asia y Oceanía.
Los religiosos profesos no sacerdotes se consolidan y superan ligeramente los 55.000. Aumentan en África y Asia (+18,5% y +44,9% respectivamente) y disminuyen en América (-3,6%), en Europa (-18 %) y Oceanía (-21,9%).
Una dinámica en fuerte decremento atraviesa el mundo de las religiosas profesas que en este momento son 713.000, frente a las 792.000 de 2001. Hay menos religiosas en Europa (-22), Oceanía (-21%) y América (-17%). Sin embargo, su aumento es significativo en África (+28%) y Asia (+18%).
Los candidatos al sacerdocio, diocesanos y religiosos han pasado de los 112.244 de 2001 a los 120.616 de 2011 con un aumento del 7,5%. El incremento más fuerte es el de Africa (+30,9%) y Asia (+29,4%) mientras Europa y América registran una contracción del 21,7% y del 1.9% respectivamente.